
Los funcionarios del Servicio de Aduanas de Supervisión de la Agencia Fiscal y las Agencias de la Policía Nacional llevaron a cabo una investigación conjunta en la operación «safari» que resultó en el desmantelamiento de una organización criminal que importaba grandes cantidades de cocaína de América del Sur a través del puerto de Valencia, según informó la Agencia Fiscal en un comunicado.
Hasta el momento, se han realizado nueve arrestos y se han intervenido 299 paquetes de cocaína con un peso total de 334 kilogramos que estaban ocultos en partes de maquinaria pesada.
La investigación se inició en mayo del año pasado, luego de la detección de un grupo criminal que alteraba los chasis de vehículos para su posterior reintroducción en el mercado mediante la falsificación de sus elementos de identificación.
Tras la detención de la investigación, se encontraron una serie de pistas que permitieron a los agentes realizar esfuerzos para identificar un envío proveniente de Colombia que levantó sus sospechas.
A través de canales de cooperación internacional, se detectó un envío en Colombia con 13 kilogramos de cocaína oculta dentro de una carga de maquinaria industrial, destinada a España.
En diciembre, la organización investigada tuvo conocimiento directo de la llegada al puerto de Valencia de dos contenedores procedentes de Costa Rica y, gracias a la labor del Servicio de Supervisión de Aduanas de Valencia, fueron identificados.
Los contenedores transportaban piezas de equipo industrial a la ONDA (Castellón) en las que, gracias a la actividad del grupo operativo de intervención técnica de la Policía Nacional, que trabajó durante dos días de forma continua, se logró localizar un total de 334 kilogramos de cocaína.
A partir de ese momento, se realizaron diversas detenciones y registros en las ciudades de Valencia, El Puig de Santa María y Benetusser, así como en los municipios de Alicante, La Nuía y Benidorm, resultando en la detención de un total de nueve personas involucradas en el tráfico de drogas y crimen organizado.
Como resultado de los registros, se intervinieron tres kilogramos de metanfetamina, 25,000 euros en efectivo, nueve vehículos y documentación falsa que la investigación utilizaba para llevar a cabo sus operaciones. Uno de los investigados utilizaba una identificación portuguesa falsa desde 2019 para llevar una nueva vida, siendo finalmente arrestado por tráfico de drogas y emitida una orden de prisión por el Tribunal Nacional.
Los detenidos fueron puestos a disposición de los tribunales de Benidorm, donde se decretó la prisión preventiva para ocho de ellos. La investigación sigue en curso y no se descartan más arrestos.