- El próximo pleno aprobará el inicio de la exposición pública del plano especial del monasterio
- El nuevo Plan prevé la construcción de 575 viviendas, de las cuales 100 serán VPP con una edificabilidad de 10.233 m2 de cubierta.
- Se modifica el itinerario de circulación para evitar el paso de vehículos por delante del acceso al edificio de San Miguel de los Reyes.
- El proyecto incluye una nueva zona deportiva para un campo de fútbol
Este jueves, el Ayuntamiento de Valencia aprobó en la Comisión de Urbanismo el inicio de la exposición pública del Plan Especial San Miguel de los Reyes. El equipo de gobierno votó a favor, mientras que la oposición votó en contra. Este paso es crucial para la recuperación del entorno del monasterio y la revalorización del edificio.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, explicó que este avance es fundamental para la recuperación del Convento de San Miguel de los Reyes. Durante los próximos 45 días, los vecinos podrán compartir sus ideas y demandas para mejorar el plan.
El Plan Especial eliminará el tráfico frente al edificio, creando un entorno más abierto con zonas ajardinadas. También se incluirá una nueva zona deportiva con un campo de fútbol. Según Giner, se ha trabajado en un nuevo diseño basado en las sugerencias del barrio.
Además, el Plan contempla la construcción de nuevas viviendas, incluyendo viviendas protegidas. El concejal destacó que el proyecto busca la colaboración público-privada para construir viviendas asequibles.
El Plan afectará a 136,136 metros cuadrados, con 64,264 metros cuadrados destinados a viviendas. El 16% será para viviendas públicas, el 74% para viviendas de renta libre y el 10% para usos comerciales.
Las nuevas construcciones se ubicarán en los extremos para preservar el espacio verde y mejorar la visibilidad del edificio. Se busca resaltar su valor monumental.
Por último, se establecerá un régimen de protección para el entorno del Monasterio, de acuerdo con su declaración como Patrimonio Cultural. Se incluirá el desarrollo de la Alquería de Tota, la Alquería d’Albors y el molino de Sant Llorenç, elementos protegidos desde 2018.